Después de los años treinta del siglo XX, México poco a poco empezó a recuperarse de los estragos que había dejado la Revolución. A pesar de la crisis económica y social que sufría el mundo, México trataba de mejorar su economía impulsando la formación de industrias y seguir con el reparto agrario que empezó con la Revolución. Un suceso importante que marcó el rumbo de México fue la nacionalización del petroleo. Desde Madero hasta Calles, el Estado trató de limitar el poder de las compañías extranjeras petroleras. Así el 18 de marzo de 1938, el presidente Lázaro Cárdenas anuncia la expropiación petrolera.
A partir de 1940, se daría el último gobierno dirigido por un militar, Manuel Ávila Camacho ocuparía la presidencia e 1940 a 1946. Durante este tiempo, empezó a establecerse un clima de unidad nacional, sin embargo no se mantuvo alejado de los acontecimientos mundiales que sacudían a la humanidad. Así que en 1942, México entraría a la Segunda Guerra Mundial, después de tres barcos mexicanos por submarinos alemanes.
Durante la guerra, México empezó una extensa campaña de alfabetización por todo el país, además, se creó el Instituto Mexicano del Seguro Social que estableció las bases para ampliar la atención médica a la población. Después de la guerra, México se encaminó a la industrialización, con lo que se estimuló el crecimiento de las industrias y de las ciudades. Se empezó la construcción de redes carreteras, aeropuertos y la Ciudad Universitaria. Poco a poco empezaba a cambiar la imagen de un México rural hacia uno más urbanizado.
En los años cincuenta, México empezaba a tener una economía que se desarrollaba rápidamente y la estabilidad se consolidó. Los gobiernos a partir de ese momento, insistían en la unidad nacional y de la modernización. Existía una visión de una economía optimista.
El crecimiento económico y la estabilidad política seguirían todavía en la década de los sesentas, se empezaba a hablarse del milagro mexicano. Crecían las ciudades, las nuevas generaciones tenían una mejor situación que sus padres, crecía la población educada y empezó a crecer la "clase media". Sin embargo fue esta clase media la que empezó un revisionismo al sistema político y económico. Empezaron las manifestaciones sociales donde manifestaban mejores condiciones.
Esta crisis tuvo su clímax con del Movimiento Estudiantil de 1968, este un movimiento social en el que además
de estudiantes de la UNAM y del IPN, participaron
profesores, intelectuales y obreros en
la Ciudad de México y que fue dispersado el 2 de
octubre de 1968 por el gobierno mexicano en
la matanza en la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco. A partir de este momento empezó una época de cambios políticos.
El milagro mexicano empezaba a ser cuestionado. A pesar de que las cifras del desarrollo económico eran altas la desigualdad seguía en aumento. Todavía en la década de los setenta se reprimían los movimientos estudiantiles, como el llamado Halconazo, y se libró una guerra sucia contra opositores del gobierno. El crecimiento económico se detuvo y la crisis petrolera mundial de 1973, hizo que el país empezara a importar productos de primera necesidad y por lo tanto, empezó a endeudarse.
En 1978, el gobierno realiza una reforma política donde abrió las puertas del Congreso a muchos diputados a la oposición. Sin embargo, México en 1982 cayó en su mayor crisis económica desde la revolución, con lo que se tuvo que devaluar el peso. No obstante a esto, el 19 de septiembre de 1985 un terrible terremoto sacudió la parte occidental del país, llevando la peor parte la Ciudad de México.
Los noventa fueron años de gran agitación política. Entra en vigor el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, con el que México entra al sistema neoliberal. Sin embargo el levantamiento zapatista y los asesinatos de Luis Donaldo Colosio y José Francisco Ruiz Masiseu sacudieron la escena política del país. México entra en una terrible crisis económica con el llamado error de diciembre.
En el años 2000, el PRI pierde una hegemonía de más de 70 años en el poder, cuando el candidato del PAN Vicente Fox gana las elecciones. En el 2006, después de unas cuestionadas elecciones, Felipe Calderón es electo presidente. Andrés Manuel López Obrador, quien quedó en segundo con menos de un punto porcentual, no reconoció las elecciones, denunciando fraude electoral. Después de esto, convoca la Convención Nacional Democrática, donde se nombraría presidente legítimo. Ahora es el candidato presidencial por el Movimiento Progresista para las elecciones del 2012.
En el 2007, Felipe Calderón inicia en su administración la guerra contra el narcotráfico, que ha dejado más de 34 mil
muertos, de los cuales 15 273 ocurrieron en 2010.