viernes, 31 de marzo de 2017

El poder detrás del trono



Desde tiempos antiguos han existido personas que, tras bambalinas, han ejercido el poder. Ya sean como consejeros y ayudantes, e incluso manipulando y dominando a los gobernantes, han manejado los hilos de sus respectivos pueblos, según sus intereses, sean o no egoístas.

Tlacaélel  fue un guerrero, pensador, y estadista mexica. Se desempeñó en el cargo de Cihuacóatl (segundo a cargo en la administración mexica). Fue consejero de varios huey tlatoani (gobenantes mexicas) entre los que están Itzcóatl, Moctezuma Ilhuicamina,  Axayácatl y posiblemente de Tizoc y Ahuitzotl. Fue el autor intelectual de la reforma religiosa, ideológica e histórica más importante en la historia de los mexicas. También fue creador de la Triple Alianza (Tenochtitlan, Tezcuco y Tlacopan) y comandó los ejércitos que derrotaron a los tepanecas de Azcapotzalco, iniciando de esta manera, la era de la dominación mexica. No llegó él tlatoani supremo y jamás tuvo la intención de serlo. Sin embargo, nada se hacía sin su intervención.  A pesar de esto, no es descrito como un tirano, sino como una persona leal, sagaz y prudente.  Al parecer su rango de cihuacóatl, consejero y segundo en el poder, le pareció suficiente. 

Tokugawa Ieyasu fue el fundador y primer shōgun del shogunato Tokugawa de Japón. Como shōgun tuvo el poder de facto de todo el país, ya que en esos momentos el tennō (el emperador) era una figura simbólica. Después de establecer las bases de su gobierno, Ieyasu abdicó a su posición oficial como shōgun en 1605, a favor de su hijo Tokugawa Hidetada, aunque en la realidad el mismo continuó asumiendo el centro del poder. En su posición de shōgun retirado, ordenó el traslado de la capital del país de Kioto a Edo (hoy Tokio). También supervisó las relaciones diplomáticas con España, Portugal y los Países Bajos, aunque prefirió mantener distancias con estos países, aunque a los Países Bajos le sería aprobado un permiso para comerciar de manera limitada.  En 1613, promulgó el Kuge Shohatto, donde pone a los daimyō bajo estricta supervisión, dejándolos como peleles ceremoniales. En 1614 promulgó un edicto para la Expulsión de los Cristianos, prohibiendo la religión completamente en el país.

Nur Jahan  fue la esposa persa de Nuruddin Salim Jahangir emperador del Imperio mogol, teniendo gran relevancia en el gobierno de su patria adoptiva. Siendo una mujer fuerte, carismática y bien educada, pudo dominar rápidamente a su marido, quien era de mente débil. De esta manera logró ser la mujer más poderosa e influyente en la corte del Imperio Mogol. Entre los honores y privilegios que logró cosechar se encuentran en ser la única emperatriz mogola en tener su nombre acuñada en monedas. También se le dio poder a su sello imperial,  lo que implicaba que su lectura y consentimiento eran necesarias antes de cualquier documento u orden recibiera validez legal. El emperador buscó sus puntos de vista sobre casi todos los asuntos antes de emitir órdenes.

Mahpeyker Kösem Sultan fue una de las mujeres más poderosas de la historia Otomana. Fue consorte del sultán otomano Ahmed I. Alcanzó el poder e influenció el curso del Imperio otomano a través de sus hijos el sultán Murad IVe Ibrahim I y finalmente a través de su nieto menor Mehmed IV. Fue Valide sultan (reina madre) desde 1623 a 1651, cuando sus hijos Murad IV e Ibrahim I y su nieto Mehmed IV reinaron como sultanes otomanos.  Durante la mayoría del reinado de Murad IV, ella como regente, guió el Imperio, asistiendo a reuniones del Diván (gabinete de gobierno) desde detrás de una cortina, incluso después de 1632, cuando ya no era una regente oficial. Cuando Ibrahim sucedió a su hermano en 1640, resultó demasiado mentalmente inestable para gobernar. Esto permitió a Kösem continuar en el poder. Por segunda vez fue regente cuando presentó a su nieto de siete años Mehmed IV al diván,  recayó en Kösem Sultan en vez de su madre, Turhan Hatice Sultan, debido a su juventud e inexperiencia.